Dos nuevos estudios comparan los efectos de diferentes adyuvantes –ingredientes añadidos a una vacuna para aumentar la respuesta inmunitaria– en personas inmunizadas con una vacuna contra el virus de la hepatitis B y en macacos inmunizados con una vacuna contra la malaria, respectivamente. En conjunto, los hallazgos sugieren que la elección del adyuvante puede tener efectos distintos y duraderos en la respuesta inmunitaria adaptativa e innata. En un artículo relacionado de Focus, Steven Reed y Darrick Carter discuten los beneficios de los adyuvantes combinados utilizados en estos estudios. "El entendimiento proporcionado por estos artículos y nuestra creciente comprensión de cómo los adyuvantes combinados pueden permitir la creación de vacunas contra patógenos que antes se consideraban intratables, combinado con las barreras reducidas para la producción de estos nuevos adyuvantes, puede llevar a soluciones en la salud global para otros desafíos", escriben los investigadores. En un estudio, Viviane Bechtold y sus colegas encontraron que una vacuna contra la hepatitis B administrada en combinación con el adyuvante AS01 a individuos sanos aumentó el número de monocitos circulantes, acompañado de un incremento en el tamaño de la respuesta de las células T de memoria CD4+. El adyuvante AS01 también provocó cambios epigenéticos en los monocitos relacionados con la inflamación, la presentación de antígenos y las vías de señalización del interferón, concluyen Bechtold y sus colegas. Estos cambios funcionales y epigenéticos no ocurrieron cuando la vacuna se combinó con un adyuvante a base de alumbre. Sus hallazgos podrían tener implicaciones para el uso de AS01 con otras vacunas para el herpes zóster, la malaria y el VRS, entre otras. En el segundo estudio, Prabhu Arunachalam y sus colegas analizaron tres adyuvantes combinados con la vacuna contra la malaria R21, que ha sido autorizada para su uso en tres países con el adyuvante Matrix-M. Arunachalam y su equipo compararon las respuestas inmunitarias duraderas a la vacuna combinada con Matrix-M, el adyuvante 3M-052+Alum y el adyuvante GLA-LSQ en macacos. Los investigadores encontraron que la vacuna con el adyuvante GLA-LSQ generó una respuesta inmunitaria más baja y de menor duración en comparación con la inmunización con los otros dos adyuvantes. Los anticuerpos inducidos por la vacuna con el adyuvante 3M-052+Alum duraron más tiempo que los de la vacunación con Matrix-M cuando se administraron con un calendario de dosis de inmunización comparable. Arunachalam y su equipo también observaron que Matrix-M y 3M-052+Alum indujeron vías de respuesta inmunitaria distintas, “demostrando que múltiples mecanismos inmunitarios innatos pueden programar una inmunidad duradera inducida por la vacuna”, concluyen.

Los dispositivos portátiles miden varios aspectos de la salud, y la variabilidad del ritmo cardíaco puede ser uno de ellos. Puede que se sorprenda cuando su dispositivo le diga que la variabilidad de su frecuencia cardíaca es alta o baja, pero ¿qué significa eso? El Dr. Elijah Behr, cardiólogo en Mayo Clinic Healthcare en Londres, explica la variabilidad de la frecuencia cardíaca y cómo influye en la salud.

El calentamiento climático antropogénico ha llevado a una mayor variabilidad de las precipitaciones en gran parte del mundo, según un nuevo estudio que señala varios puntos críticos para esta tendencia. Este efecto es particularmente prominente en Europa, Australia y el este de América del Norte, de acuerdo con los autores del estudio, y se debe en gran medida al aumento de la humedad atmosférica y a los cambios en la circulación atmosférica a escala decenal. A medida que el clima se calienta, la atmósfera se vuelve más capaz de retener humedad, lo que lleva a mayores fluctuaciones entre eventos de precipitación extrema y oscilaciones más amplias entre episodios húmedos y secos. Tal variabilidad amplificada de las precipitaciones puede impactar profundamente en la sociedad humana y los ecosistemas, planteando desafíos para la previsión meteorológica y climática, así como para la planificación de adaptación y resiliencia. Aunque muchos modelos climáticos globales proyectan un aumento en la variabilidad de las precipitaciones, especialmente en regiones húmedas, debido a una mayor humedad atmosférica y una circulación atmosférica a gran escala debilitada, el fenómeno es mucho más fácil de predecir que de observar. Como resultado, no está claro si la mayor variabilidad de las precipitaciones ya ha surgido en las observaciones. Para abordar estas incertidumbres, Wenxia Zhang y sus colegas aprovecharon cinco conjuntos de datos a escala global y ocho a escala regional de observaciones diarias de precipitaciones que abarcaron desde 1900 hasta 2020. Zhang et al. informan que la variabilidad de las precipitaciones se ha amplificado sistemáticamente en el último siglo en varias escalas de tiempo y regiones, impulsada principalmente por el aumento de la humedad atmosférica debido al calentamiento antropogénico. Según los hallazgos, aproximadamente el 75% de la superficie terrestre ha experimentado una amplificación de la variabilidad de las precipitaciones, con una variabilidad diaria aumentada en un 1,2% por década a nivel mundial. Los autores señalan que estas oscilaciones de precipitaciones representan “amenazas para la resiliencia climática de infraestructuras, la gestión de riesgos, la agricultura, las funciones de los ecosistemas y el desarrollo económico.”